Al fin llegó el día...

Mi día empezó siendo aburrido como ninguno otro. Me levanté temprano para bañarme y escuchar todo el día las quejas de mi mamá.

queja.
1. f. Expresión de dolor, pena o sentimiento.
(RAE)

¿Pena o sufrimiento de qué? Sólo ella lo sabe. Lleva tres días de un humor que no se aguanta y a todos nos lleva de corbata. De este modo, lo primero que escuché en el día no fue un "Buenos días", un "Te quiero mucho" o siquiera un "Lávate los dientes". No importa en verdad qué fue lo primero, porque no son palabras que te hacen sentir bien.

Pasando a otras cosas, el lunes empiezo un súper curso de manejo de una semana que me están obligando a tomar. Espero que cuando ya sepa qué hacer con un auto, no me agarren de chofer, porque ODIO, DETESTO, MECHOCA el rollo de la manejada. Yo en metro y en pesero soy más que feliz.

Sábado y tuve clase de Armonía Tradicional de dos horas. Estuvo bastante bien. Creo que afirmé algunas cosas que me hacían falta me distraje un rato.

¿Qué más? Pues, caray, debo admitirlo, no me gusta que no estés =( Me deja sin algo interesante que hacer o quien platicar. Hasta hacer los aburridos talleres platicando contigo es mejor. Debí de haber buscado a alguien para salir, pero ya mis amigos tenían planes. Así que, no me queda de otra: a hacer talleres. Todos los que pueda para distraerme y ver si dejo de extrañarte aunque sea un ratito. No porque no me guste, sino porque me da un cierto sentimiento de nostalgia y así paso de un día aburrido a uno deprimente. Fuchi...

No creí que esto pasaría tan pronto, pero, por primera vez, no quiero escuchar ni una sola canción de Sabina, por aquello de que son deprimentemente misóginas y cultas. Mejor, jugaré un rato en internet y luego que vengan los talleres...