Puedo ponerme cursi y decir
que tus labios me saben igual que los labios
que beso en mis sueños,
puedo ponerme triste y decir
que me basta con ser tu enemigo, tu todo,
tu esclavo, tu fiebre, tu dueño.
El día empezó musicalmente bien y eso colaboró a que pudiera tener una buena mañana; sin embargo, la cosa no se pudo mantener en equilibrio, como el problema de Estática (el cual, un wey fresa expreposéis esperaba que le pasara... Estaba yo tan de buenas que no le contesté mal =P...). Bueno, la verdad siguió bien, sin tomar en cuenta que me puse 'chipil' por una razón muy fuera de mi autocontrol.
Y si quieres también
puedo ser tu estación y tu tren,
tu mal y tu bien,
tu pan y tu vino,
tu pecado, tu dios, tu asesino…
Ayer terminé el primer semestre de Ingeniería y Producción de Música Popular Contemporánea (es una sola) y Composición de Música Popular Contemporánea. ¡Oh, sí! Aún no sé todas mis calificaciones, pero sé que voy bien. La verdad es que el rollo me gusta mucho, soy muy clavada y matada. Y, la verdad, no me daL pena decirlo. Al contrario. Porque antes que todo, hay que sacarle jugo al trabajo, y no de uvas precisamente.
O tal vez esa sombra
que se tumba a tu lado en la alfombra
a la orilla de la chimenea
a esperar que suba la marea.
Y, platicando con un AMIGO de toda mi vida desde que tengo amigos, nos dimos cuenta de todo el 'tiempo' que ha pasado, de cómo pasó pre-escolar, primaria, secundaria, LA maravillosa preparatoria y... ¿Ahora? Pues la universidad, siguiendo los caminos que creemos nos fueron marcados. Sí, creemos. Creemos y por eso podemos y por eso estamos en ellos, con todo y baches y abismos y caídas e injusticias y paredes y fresas capitalistas. Seguimos porque tenemos fe y creencia en nosotros mismos y en lo que amamos. Él dejó la danza, cuando llegué a creer que era LO SUYO. Es una lástima, pues era EL danzante. Y lo recuerdo, yo asistía a las presentaciones del grupo de danza de la preparatoria sólo por él. Bueno, después se unió otra AMIGA y tuve dos razones para ir. Después se agregaron más, pero yo iba por ellos dos practicamente. Después de todo, no le hizo tan feliz y prefirió otras cosas, lo cual, a mi punto de vista, creo que es una buena decisión.
Puedo ponerme humilde y decir
que no soy el mejor,
que me falta valor para atarte a mi cama,
puedo ponerme digno y decir,
“toma mi dirección cuando te hartes de amores
baratos de un rato, me llamas”.
El punto es que nos vimos hablando de recuerdos, de pasado, de etapas y, de la nada, de planes, de metas, de tareas difíciles, de proyectos, de universidades... Caray, el futuro llegó a nosotros y viceversa. Y, sin embargo -te quiero-, aún nos falta mucho por caminar y soñar y realizar y volar!
Y si quieres también
puedo ser tu trapecio y tu red,
tu adiós y tu “ven”,
tu manta y tu frío,
tu resaca, tu lunes, tu hastío…
Así es, mi buen Dios, decimos que el tiempo se nos pasa más rápido, pero no es verdad. Lo que sucede es que cuando somos infantes no lo gastamos en mirar tanto hacia atrás, no contamos las cosas que debemos de hacer en el día, no vemos la hora a cada rato para calcular los minutos que faltan para que termine una clase, no fruncimos el ceño todo el día (en serio, intenten relajar su cara mientras caminan por la calle, por favor), no nos preocupamos por comer sano para mantenernos en equilibrio, sino porque nos dicen que, de lo contrario, no hay postre... Y miles de cosas por el estilo. ¿Cuándo nos olvidamos de que jugar en el lodo es genial? ¿Cuándo creemos que maduramos y pensamos que si vemos todo serio, es porque así son las cosas? ¿Cuándo empezamos a ser hostiles con los demás 'niños' porque vemos que son fresas o emo o dark? ¿Cuándo empezamos a analizar a la gente que nos rodea para saber si nos conviene o no? Por eso, hoy quise recordar de modo vivencial qué se siente ser niña pequeña de nuevo... Llegué a mi casa y me comí el postre antes de la sopa, no comí de las verduras que no me gustan y me valió madres el agua natural, pues tomé un Boing de mango (¡Oh, seeeeeeeeeeeeeeee!). Cuando terminé de comer, no recogí mi plato y me dispuse a ver 31 Minutos, el capítulo en el que le hacen homenaje al tío Horacio. Siempre pasan ése, pero ya no lo había visto, je, je, je. Después, me quedé tumbada en el sillón. Llegaron mi mamá y mi hermana de sus 'cosas de miércoles' con helado de Cocholate y de Café. Como mañana no tengo Laboratorio de voz porque ya estoy de vacaciones intersemestrales, pues comí! Ya la próxima semana regreso a mis ejercicios, vocalizaciones y solfeos que no disque debo abandonar =P
O tal vez ese viento
que te arranca del aburrimiento
y te deja abrazada a una duda,
en mitad de la calle y desnuda.
¿Qué más pasó? Ah, pues antes de que llegara mi mamá hice un berrinche espantoso (y estaba sola, imaginen que horror... Pfff!) porque me siento 'chipil' y nadie me apapachaba en ese instante. Ah... Qué bien se siente ser niña de nuevo, aunque sea un ratito... Hoy no haré tarea. Voy a hacer lo que me gusta y porque quiero.
Y si quieres también
puedo ser tu abogado y tu juez,
tu miedo y tu fe
tu noche y tu día.
Creo que voy a tocar el teclado, a cantar, a jugar a ver qué compongo, voy a leer El Principito y escucharé canciones de Cri-Cri y Luis Pescetti. Y cantaré muy fuerte, "BONITA, COMO AQUELLOS JUGUETES, INFANTILES DE AYER", acompañada de Tin Tán (mi papá me la cantaBA porque a mí me gusta desde que soy bien morra, pero eran otros tiempos en los que creía en la comunicación sin conocer el término...)
Tu rencor, tu porqué, tu agonía…
o tal vez esa sombra
que se tumba a tu lado en la alfombra
a la orilla de la chimenea
a esperar que suba la marea.
Te extraño mucho, tú... ¿Dónde andas? ¿Qué es de ti? ¿Qué no leíste que ando 'chipil'? ¿Por qué no me llamas? ¿Me quieres hacer llorar? ¿Ya no me quieres? Sniff... Ya que... Sniff =(
Ah, y la idea de poner la rola en medio, no es mía... Pero no me importa ^-^. ¡Me quiero! (Y esto último no debería ir en cursiva, caray!)